Un motorista alertó a los compañeros del fallecido sobre un vehículo en marcha por el arcén

Los hechos se produjeron hacia las 11.30 de la mañana, en la carretera que va hacia el pantano de Navamuño, a la altura del Puente de los Avellanares, cuando un motorista se encontró con un dúmper en marcha junto a uno de los arcenes, sin ningún conductor y con el asiento fuera de su sitio. El motorista siguió avanzando por la carretera hasta encontrar a unos trabajadores de una empresa de excavaciones que realizaban labores de desmonte para la Confederación Hidrográfica del Tajo, poniéndoles al corriente de los hechos.

Los trabajadores bajaron hasta la zona que les habían indicado, encontrando el vehículo y comenzando la búsqueda del trabajador. Tras unos momentos de incertidumbre, en los que no aparecía debido a la maleza y a que se encontraba en un lugar escarpado, dieron con el cuerpo, oculto por la abundante vegetación, en la ladera de la montaña.

Sus compañeros, mientras unos trataban de reanimarle otros intentaban llamar por el móvil al 112 buscando cobertura, pues se trata de una zona de montaña en la que es bastante limitada. Una vez que los servicios de emergencia llegaron al lugar, sólo pudieron certificar su muerte.

Sobre las 13.35 horas la policía judicial hizo acto de presencia para recoger indicios que dieran luz sobre lo ocurrido, mientras se producían escenas de tensión y desconsuelo entre familiares y compañeros del fallecido.

Al parecer, el dumper se había despeñado por la falda de la montaña hasta caer en la carretera de la parte inferior, cruzándola, mientras el conductor del vehículo quedaba en la ladera perdido entre las escobas y los helechos.

El levantamiento del cadáver se produjo sobre las 13.45 hrs. por la jueza del Juzgado de Béjar.