Teresa de Jesús Vº Centenario

Todavía resuenan las campanadas de las celebraciones iniciales del V centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús, que tuvieron lugar el pasado 15 de octubre en Ávila, lugar del nacimiento, y en Alba de Tormes, sepulcro de la Santa. Las diversas comisiones, la nacional presidida por sus majestades los Reyes de España, y otras provinciales o locales, proponen y promueven cantidad de actividades religiosas y culturales para dar relieve al magno acontecimiento.

En estos días, Salamanca toma el colorido teresiano, al celebrarse en ella un congreso internacional de gran relieve en nuestra Universidad Pontificia.

En la diócesis de Salamanca, la devoción popular a Santa Teresa está más que probada, aunque nada más sea por la existencia de imágenes de la santa en prácticamente todas las iglesias o parroquias de la misma diócesis. Por supuesto, la devoción es más que notoria en los habitantes de Alba de Tormes y su comarca.

Lo que ya no es tan claro es que los salmantinos conozcamos la vida y obras de nuestra querida Santa. Y mucho menos que tratemos de imitarla en su proceso de oración, de unión con Dios, de servicio a la Iglesia y, en definitiva, de su santidad.

La Santa fue proclamada patrona de España, junto con Santiago de Compostela, en torno a los años de su canonización, a principios del siglo diecisiete. También por entonces se declaró patrona de nuestra diócesis de Salamanca, igualmente en forma compartida con San Juan de Sahagún. Es, además, patrona de juristas, escritores y varias armas de nuestro ejército nacional. Por supuesto protege a la multitud de Teresas que se encomiendan a sus oficios protectores.

Quizá lo más notable de esta santa mujer es que la universidad de Salamanca la declaró doctora honoris causa hace ahora un siglo, antes de que la declarara el Papa Pablo VI en 1970 primera mujer doctora de la Iglesia, junto con Santa Catalina de Siena.

El congreso teresiano nos da estos días, hasta mañana sábado, la oportunidad de conocer un poco más a nuestra gran santa. En él se presentan diversos estudios, conferencias y comunicaciones, bien documentados, en torno a tres campos de reflexión: la historia de la mujer y de su tiempo, la lengua y literatura reflejada en sus escritos, y el pensamiento humano, cristiano y místico de la gran fundadora, reformadora y maestra de oración.

Teresa de Jesús es conocida y reconocida en diversos ambientes religiosos, no sólo católicos y ortodoxos, sino incluso del mundo protestante y de las grandes religiones orientales y otras. Hasta fuera de los ámbitos religiosos es admirada como mujer liberada y liberadora, comunicadora de experiencias de introspección personal, y como mujer de amplios conocimientos literarios y de grandes capacidades creadoras de comunidad y de gobierno efectivo, incluso con profundo sentido empresarial y de dominio económico.

Tenemos un año entero por delante, a lo largo del proclamado centenario, no sólo para ganar las indulgencias y gracias que la Iglesia concede en estas ocasiones, especialmente ligadas a los lugares sagrados teresianos y carmelitanos. En Salamanca estos lugares son abundantes y se destaca, sobre todo, la iglesia del sepulcro de la Santa en Alba de Tormes. Pero también podemos beneficiarnos de conferencias, actos culturales y artísticos o musicales, de la sesión de las Edades del Hombre planteadas para celebrarse en doble sede: Ávila y Alba de Tormes. Será posible, además, organizar rutas teresianas o peregrinaciones a los lugares santos teresianos, y especialmente a las diecisiete fundaciones de Santa Teresa.

El gran reto será continuar profundizando en el conocimiento del mundo humano y espiritual de la Santa, y en el empeño por aproximar nuestras vidas al modelo vital de esta santa mujer, escritora, fundadora, maestra, doctora y santa.