Jueves, 25 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Antonio Colinas: “La poesía es la razón de ser de mi vida”
X
ENTREVISTA AL RECIENTE PREMIO DE LAS LETRAS TERESA DE ÁVILA

Antonio Colinas: “La poesía es la razón de ser de mi vida”

Actualizado 27/09/2014
Charo Ruano

"Tengo un compromiso profundo con la creación poética", afirma el autor de 'Canciones para una música silente', para quien "Querámoslo o no, la poesía va unida al pensar y al sentir, a las emociones y a las ideas esenciales".

[Img #116000]

Antonio Colinas?Poeta sobre todas las cosas, Maestro?No es necesario presentarlo, ni decir nada más. Uno de los nombres principales si hablamos de poesía en nuestro país, con una espléndida obra a sus espaldas, que conjuga poesía, ensayo, traducción, critica, siempre desde el rigor, la honestidad intelectual y la coherencia. Viajero que siempre regresa a sus orígenes, intelectual de los que van quedando pocos, es un privilegio hablar con él y con nadie más podíamos acabar esta serie de entrevistas.

.-¿En verano se hicieron cosas distintas?

Normalmente, sí. En mi caso procuro que llegue más a mi mente ese vacío-vacío que evita los compromisos, el trabajo, los viajes. Imprimimos otro ritmo a nuestras vidas que, en mi caso, a mi edad, me gustaría que fuese más lento.

.- Decir Antonio Colinas es decir poesía? ¿Poeta sobre todas las cosas?

Creo que sí. He escrito libros en otros géneros, pero la poesía es la base o sustrato de todos ellos. Y quizá la razón de ser de mi vida. Tengo una actitud ante la poesía que a veces sorprende, pero no podría abordarla de otra forma, si no es desde un compromiso profundo con ella.

[Img #115999]

.- Es además narrador, un excelente crítico, traductor, ensayista, la poesía no es suficiente, hay que ampliar el círculo?

A veces hay que utilizar otros géneros para expresarnos, aunque la poesía siempre sea la raíz de mi escritura. En los "Tres tratados de armonía" he procurado que el texto sea un poco poema en prosa, y un poco aforismo, y un poco pensamiento; incluso que tenga algo de página de Diario. Novelas y libros de cuentos también buscan ese sentido general, traspasado de universalidad, que sólo nos proporciona el lenguaje poético.

.- Curiosamente no estuvo usted en la famosa antología de Castellet.

Sí, éste ha acabado siendo un tema de preceptiva literaria y siempre regresa en los comentarios de los estudiosos. A esta situación sí que se le puede aplicar aquello de "brillar por la ausencia". Por otro lado, no había tampoco razones para que yo estuviera en esa antología, que nació en torno a un grupo de amigos y en una ciudad concreta, Barcelona. La antología de Enrique Martín Pardo ("Nueva poesía española", reeditada por Hiperión hace poco), que nació el mismo año, no tuvo la misma fortuna publicitaria. Al parecer, Castellet pensaba que mi poesía era "demasiado clásica", pero el tiempo se lleva por delante cuanto es "fuego de artificio" en los poemas y acaba quedando en el tiempo ese canon de verdad y belleza que es lo clásico. Lo clásico para mí no es lo caduco o lo muerto sino lo que resiste maravillosamente al paso del tiempo. De ahí el que Machado nos recordara que la poesía debía ser "palabra en el tiempo"; es decir, no sólo la palabra de hoy, sino también la del pasado y la del mañana.

.- Cuánto ha cambiado desde aquel primer: Poemas de la tierra y de la sangre, y Preludios a una noche total , hasta este último libro Canciones para una música silente

Afortunadamente, bastante. A veces los lectores se quedan fijados en una determinada etapa de mi poesía, pero no se comprende ésta sin la visión global de la misma, sin la lógica evolución en el tiempo. De ahí que un libro como "Sepulcro en Tarquinia" no tenga sentido sin el carácter metafísico, meditativo de "Noche más allá de la noche", o sin el humanismo de mis últimos cuatro libros de poemas. Se ha dicho, en este sentido, que "Canciones para una música silente" recoge, en sus ocho secciones, ocho de mis "voces"; constituye, ha escrito Antonio Lucas, una "suma" de todo cuanto he querido decir en poesía. En él están Extremo Oriente, mis raíces en nuestra tierra y el mundo mediterráneo, la mujer, el humanismo, etc.

.-Sepulcro en Tarquinia fue ya un paso en firme, un afianzarse, sentirse definitivamente poeta.

Es un libro, me consta, que marcó a varias generaciones de lectores, que posee un fulgor especial, y en su día supuso también un riesgo escribirlo. En él ya aparece uno de los temas claves de mi obra: el diálogo de mis raíces leonesas con el mundo o espíritu mediterráneo, concretamente el italiano; pero yo no puedo seguir escribiendo como entonces, y de ahí esa necesidad de evolucionar de acuerdo con la vida. Para mí, la experiencia de vivir y la experiencia de escribir van fundidas.

.-¿Son buenos tiempos para la lírica o a veces no queda otro remedio?

Octavio Paz decía que la poesía siempre estaba un poco en "las catacumbas". De ahí la necesidad de que el poeta se mantenga firme en su misión, a contracorriente de los otros lenguajes invasores (el económico, los de la imagen, el político?). Por tanto, siempre son malos y buenos tiempos para la lírica. La poesía permanecerá siempre. La tenemos en Mesopotamia y en China desde el siglo XX antes de Cristo. ¿Por qué habría de desaparecer? El día que no tuviéramos poesía, el ser humano sería otra cosa que humano. Querámoslo o no, la poesía va unida al pensar y al sentir, a las emociones y a las ideas esenciales.

.- Quedarse en provincias es casi siempre un hándicap en esto de la escritura, del reconocimiento, ¿se ha arrepentido de no haber hecho las maletas alguna vez? Nunca le ha tentado la capital y sus cenáculos allí podría tener una carrera?"con mayúsculas" (Ya la tiene) pero con más resonancia?

[Img #116001]

Llegué a Madrid en el otoño de 1964, a mis 18 años, y viví intensamente allí durante unos años la vida literaria. Mis amistades literarias y mi permanencia en los medios de comunicación desde entonces tienen su origen en aquella estancia. Luego, viví cuatro años en Milán y regresé para vivir tres más en Madrid, pero la gran ciudad no es para mí. Siempre estoy como huérfano de los espacios naturales de mis raíces. Por eso, vivo en una ciudad de dimensiones humanas como Salamanca. Ya pasaron los tiempos en que había que ir a la gran ciudad para vivir la literatura. Lo primero siempre es escribir, escribir en la soledad de nuestro cuarto. Lo que entendemos por vida o mundo literario desgasta mucho, y sobre todo confunde al escritor que comienza.

.-Da la impresión de que hay una especie de renacimiento de la poesía, muchos poetas jóvenes, muchos grupos, antologías, excelentes ediciones, Pre-textos, Renacimiento, Vaso roto, Delirio?

Estoy de acuerdo. Desde hace cinco o seis años venimos observando un regreso a la libertad de crear, después de aquel poema plano y prosaico que se tendía a hacer de manera obsesiva. Antes también había predominado el posculturalismo. Siempre se dan estos ciclos, pero yo me alegro mucho de que hoy los más jóvenes estén recuperando la libertad de crear y de que su poesía se vuelva a abrir de nuevo a la cultura, a lo metafísico, a la naturaleza, a las emociones, a la libertad, en suma.

.- Hay quien dice que los jóvenes poetas tienen mucha prisa, seguro que eso ha pasado siempre, pero las redes sociales multiplican esto, la poesía debe hacerse con calma, o siempre empezamos acelerados y ahora se nota más?

Sí, algo de ello es cierto. Parece, por ejemplo, que los más jóvenes no tienen ya el referente de los maestros y que se tiende ?debido precisamente a los nuevos medios informáticos? a acelerar los mensajes, a "empezar por arriba", cuando la escritura es el fruto de una germinación y de una maduración en el tiempo. El poema es un "fruto" no un "producto". Vuelvo a esa imagen del escritor frente a la página en blanco en la soledad de su cuarto. Sí, a veces, hoy parece que esa página en blanco da terror y que la imagen y la prisa van ocupando el terreno de la pura palabra.

.-Su obra ha estado siempre abierta a otras culturas, India, China, Corea?por poner solo algunos ejemplos

Sí. Yo me siento, como he dicho, un poeta con "raíces", que están en estos territorios de mi tierra leonesa y que ahora descienden por Zamora hasta las sierras salmantinas y por extensión a toda nuestra Comunidad. Territorio el nuestro de frontera, de cruce de caminos, muy rico antropológicamente; pero he evitado siempre caer en el costumbrismo o en lo local. Por eso, siempre he puesto a dialogar a esas "raíces", con otras culturas, bien a través de mis vivencias, bien de mis lecturas. De ahí el sentido de universalidad de mi obra, que creo que es una de las claves primordiales de la misma. Extremo Oriente, la América hispana, las culturas de las dos orillas del Mediterráneo, han sido importantes para mí en este sentido.

.-Si le digo Italia

Siempre he dicho que mi vida se puede dividir en dos grandes etapas, antes y después de mi estancia en Italia. Nadie sale indemne de esa experiencia de vivir Italia, y de aprender en Italia. El Renacimiento italiano nos remite ejemplarmente a ese sentido de universalidad fecunda a que antes me refería. Italia me llevó también a la difícil tarea de la traducción, que como la literatura o la crítica, es una labor que me ha acompañado más de cuarenta años.

.-Y María Zambrazo

Es, junto Aleixandre, uno de mis dos maestros. Ella más en el campo del pensamiento que en el de lo estrictamente literario. A María la conocí cuando aún vivía en Ginebra. Luego, ya en España, nos seguimos viendo y siguió con atención la creación de mi libro "Noche más allá de la noche". Le hice una larga entrevista sobre el tema de la Iniciación, que ella quería que hubiéramos continuado, pero su muerte lo impidió. Ella escribía como hablaba y hablaba como escribía, y su amor hacia la poesía fue muy especial. No en vano, ella había tenido, durante sus años en Segovia, los referentes de Juan de la Cruz y el magisterio de Antonio Machado.

.- Y Vicente Aleixandre

Lo conocí al llegar a Madrid. Es el maestro al que le llevas tus primeros y titubeantes poemas, el que te dice la verdad, te corrige y a la vez te anima. Aprovecho aquí la ocasión para recordar un viejo y lamentable tema: el del abandono de su casa, por la que pasaron cinco generaciones de poetas. Todos tienen la culpa de esa situación.

.- Proyectos, ¿qué se trae entre manos?

Después de cada nuevo libro de poemas siento un gran vacío, esa sensación de que no voy a escribir más. Pero afortunadamente siempre regresa la palabra. Ahora llevo bastante avanzado el que habrá de ser mi "Cuarto tratado de armonía". Estos libros son de escritura muy lenta, como los de poesía, y no sé cuándo lo voy a terminar. Lo que sí sé es que va a ser más extenso que los anteriores.

.-¿Qué libro ha leído últimamente que le ha dejado sin aliento?

Me ha impresionado mucho volver a la vida y a la obra de Tolstoi, gracias al libro de Romain Rolland, que ha editado Acantilado. Y por una curiosa confluencia, estoy releyendo "El doctor Zhivago", de Pasternak, porque quiero hablar de este autor en las "Conversaciones de Formentor", en las que participaré en septiembre en Mallorca.

.-¿Y qué nos recomendaría para leer?

Estas dos lecturas que acabo de nombrar podrían servir. Una más rápida. La otra, para dedicarle más tiempo. El caso de Pasternak me parece significativo porque en él se dio ese cruce (que suele ser terrible) entre el poeta y la Historia. Todo esto se aprecia muy bien en su novela.

.-¿A qué autor, a qué libro vuelve siempre?

Sobre todo, en lo que se refiere a la novela, tiendo siempre a releer. De aquí el que vuelva siempre a autores como Cervantes, Stendhal? En poesía, Góngora, Lope, los clásicos españoles de siempre, pero también los hispanoamericanos. A raíz de la preparación de mi antología de poesía en español , "Nuestra poesía en el tiempo", que editó Siruela, me sumergí mucho en el modernismo americano. Rubén Darío, Neruda, Paz, son otros referentes. Los grecolatinos, Dante, Seferis? Pero sobre todo vuelvo mucho a los libros de pensamiento y de filosofía orientales, a los textos de la mística de todas las culturas. Por cierto, de "Nuestra poesía en el tiempo" acaba de hacer una edición para bibliotecas y centros de enseñanza el Ministerio de Educación de Perú. Estas noticias son las que de verdad nos animan a seguir creyendo en la poesía, en su proximidad a la educación, a la vida.

.- Planes para el otoño que se acerca

Quiero poner otro ritmo a mi vida, aunque quienes trabajamos con la cabeza no podemos decir aquello de que ya estamos "jubilados". Voy a poner freno a mis viajes, quiero estar más en Salamanca, llevar más una vida interior, pero algunos compromisos no me faltan. Voy a participar en el Hay Festival de Segovia y tendré un diálogo ante el público en la Fundación March de Madrid, dentro de un ciclo con exbecarios de la Fundación? Quizás el año que viene tenga que hacer un nuevo viaje a México.

Charo Ruano

Fotos: Eduardo Margareto

Comentarios...