Casi 200 personas participan en el primer día festivo

Palomares de Alba está de fiesta un año más, en esta ocasión con antelación y el último día de agosto. Esta pequeña pedanía de Alba de Tormes, en la que apenas durante el año viven vecinos, no cesa en su afán festivo y de recuerdos pasados y congrega anualmente a familias que un día convivieron entre sus actuales ruinas.

El buen ambiente fue una vez más la tónica predominante de las fiestas. La primera jornada festiva se inició con una misa en la iglesia de San Pedro de Alba de Tormes y prosiguió en Palomares con una paella para 200 personas. Posteriormente y durante la sobremesa, los comensales jugaron al bingo y también se organizó un campeonato de calva en el que participaron veinte personas.

También hubo tiempo para los más pequeños que disfrutaron de juegos infantiles. Ya por la noche los asistentes disfrutaron en un baile con el dúo 'Baila conmigo', en la carpa instalada en el centro del pueblo.