Agustín Risueño une corriendo desde este miércoles Santiago y Miróbriga

A la hora de publicarse esta información, en la madrugada del martes al miércoles, el mirobrigense Agustín Risueño se encuentra en pleno viaje en autobús hacia Santiago de Compostela. Allí comenzará, nada más bajar del autobús (hacia las 8 de la mañana), un reto absolutamente inolvidable: Los 500 de Asís. Bajo ese nombre se esconde el desafío de unir Santiago de Compostela y Ciudad Rodrigo -separadas por casi 500 kilómetros- en sólo 7 días corriendo y andando.

El reto de Los 500 de Asís fue diseñado a finales del año 2013, con motivo del Año Franciscano, por tres atletas mirobrigenses especialistas en pruebas de ultrafondo (es decir, de larga distancia): Abel Atalanta, Manuel Jesús Gómez Fraile y Agustín Risueño. La idea original era que el desafío de Los 500 de Asís lo hicieran ellos tres junto a otras personas que se quisieran sumar a la aventura.

Sin embargo, Manuel Jesús Gómez Fraile y Abel Atalanta tuvieron que renunciar en las últimas semanas, uno por motivos deportivos y otro por motivos profesionales. Eso dejaba a Agustín Risueño como único atleta que podía realizar el reto, lo que le llevó a pensarse mucho el ponerse o no en marcha.

Como prueba definitiva, hace unos días unió corriendo en una única jornada Salamanca y Ciudad Rodrigo (por una ruta de unos 100 kilómetros de distancia), acompañado esta vez sí de Abel Atalanta y Manuel J. Gómez Fraile. Según apunta, "llegamos fatal, pero como lo completé, ayer [por el lunes] me decidí a realizarlo".

Como ya hemos comentado, el punto de partida de Los 500 de Asís es la Plaza del Obradoiro en Santiago de Compostela. En el momento de charlar con Ciudad Rodrigo Al Día sobre el desafío ?en la mañana del martes-, Agustín Risueño no tenía muy claro cómo iba a ser esa salida: "supongo que desayunaré, daré una vuelta por la Plaza y poco más", porque el objetivo es "salir de inmediato".

Como camino para unir Santiago de Compostela y Ciudad Rodrigo los creadores de Los 500 de Asís escogieron desde un principio el denominado Camino Torres, que transcurre por Pontevedra, Redondela, Tui, Ponte de Lima, Braga, Guimarães, Amarante, Lamego, Sernancelhe, Trancoso, Pinhel, Almeida, Ciudad Rodrigo, y que acaba en Salamanca capital ?Agustín Risueño finalizará la aventura en Miróbriga-, en etapas de una distancia original de unos 25-30 kilómetros.

El objetivo de Agustín Risueño es hacer sólo 7 etapas, de unos 70-80 kilómetros cada una, pero todo depende de cómo se encuentre y los lugares que vaya encontrando para descansar. Según sus previsiones, estará en ruta cada día unas 10-11 horas, aprovechando lo máximo posible las mañanas y descansando las horas de más calor. El transcurso del camino ?como por ejemplo en qué lugares parará- está un poco 'en el aire', tal y como le gusta hacer las cosas a los aventureros mirobrigenses mencionados más arriba.

Al hacer el camino en sentido inverso, una de sus principales preocupaciones es no tener problemas con las señalizaciones. Para ello, Agustín Risueño ?que no llevará ningún tipo de apoyo, cargando en todo momento con sus pertenencias- ha metido en el GPS la ruta detallada.

Los primeros días, el Camino será más entretenido, ya que se encontrará con numerosos peregrinos en tierras gallegas (en dirección contraria a la suya), pero cuando se adentre en Portugal esta situación cambiará.

Una vez ya haya llegado a tierras salmantinas, siempre que no haya problemas con la batería del móvil, tiene en mente ?no está confirmado- el avisar de su cercanía por si alguien quiere acompañarle en los últimos kilómetros. La llegada a Miróbriga tampoco está definida, aunque una de las opciones más probables es que llegue hasta la Catedral de Santa María. Esa llegada se producirá, si todo marcha correctamente, el martes 26. El desafío de Los 500 de Asís ya está en marcha.