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La Cofradía del Santísimo solicita al obispo su mediación para reconducir el futuro de la...
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REUNIÓN DE COFRADES

La Cofradía del Santísimo solicita al obispo su mediación para reconducir el futuro de la...

Actualizado 29/07/2014
Redacción

VITIGUDINO | Acuerdan pedirle al Prelado que les permita participar de su fe bajo las mismas características de como venían haciéndolo hasta ahora

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Miembros de la Cofradía Sacramental 'Villa de Vitigudino', entre los que se encontraba su aún presidente, Jesús Criado, han mantenido este martes una reunión para intentar reconducir la situación de esta Hermandad después de que en su última reunión se planteara su disolución como consecuencia de las diferencias con los tres párrocos de la localidad respecto a la oposición de estos para que una de sus cofrades tomase las varas de mayordoma del Corpus por incumplir, "según su interpretación" ?añade el presidente?, uno de los estatutos de la Hermandad.

La principal conclusión de esta reunión se estriba en la solicitud de una audiencia al obispo de Salamanca, Carlos López, para informarle personalmente del conflicto surgido entre la Cofradía y los párrocos, así como mostrarle su disposición a seguir manteniendo la actividad de la Cofradía bajo "las mismas condiciones que hasta ahora", por lo no se descarta una modificación estatutaria que permitiera los objetivos que persigue esta Congregación, y que se fundamentan ?principalmente? en la exaltación al Santísimo, una circunstancia que algunos cofrades consideran factible sin necesidad de llevar a la práctica cada uno de los requerimientos que comporta procesar la religión católica, muchos de ellos "obsoletos en los tiempos actuales y que la mayoría incumple", aseguran.

En este sentido, y como ya informó en primicia SALAMANCA rtv AL DÍA el pasado sábado, la oposición de los párrocos a que esta cofrade fuese nombrada mayordoma del Corpus ha sido el detonante para que los problemas que desde hace unos años arrastra la Hermandad salieran a la luz, especialmente por la ausencia de nuevas vocaciones, circunstancia a la que ?por otro lado? poco o nada ayuda a solventar la actitud de los sacerdotes, como sostienen muchos vecinos o cofrades.

La relación de pareja fuera del Sacramento del Matrimonio que mantiene esta cofrade vulneraría ?según los párrocos? el precepto número 4 de los estatutos de la Cofradía y en el que se hace referencia a que podrán formar parte de la Hermandad "(...) todo fiel bautizado que esté en comunión de fe y costumbres con la Iglesia Católica?", una norma tan amplia como difusa y que en opinión de los cofrades está sujeta a múltiples interpretaciones, porque como señaló a este medio el párroco José Antonio Andújar, "cada cura.., unos la aplican y otros, por evitarse problemas, eligen el camino siempre más fácil; pasas del tema como si no pasara nada, pero llega un momento en el que no puedes?, si soy pastor y no educo o no digo la verdad estoy traicionando?".

Apoyo del obispo a los sacerdotes

Por otro lado, y como ya recogió este diario de acuerdo a las manifestaciones de Andújar, el Prelado de la Diócesis de Salamanca apoya la decisión de los párrocos ante una situación del todo compleja. En este sentido, aseguró que "también he estado hablando con don Carlos, el obispo, varios días. ?¿Qué hago don Carlos en esta situación??, porque al final es el que aprobó los estatutos que están rigiendo a la Cofradía ahora; y les dije a ellos, para que no vieran que era una cosa mía, que en Salamanca están por encima; y el obispo siempre me ha dicho ?¡oye!, si esto es lo que hay que hacer? , que lo que no sirve es que tantos curas no digan toda la verdad, y que es por lo que los fieles están un poco despistados".

La relación de pareja que mantiene esta cofrade fuera del Matrimonio eclesiástico es para los sacerdotes una "situación no acorde con lo pide la Iglesia. (?) Está todo escrito ?añade Andújar?, no podemos hacer cada uno lo que queramos, y en esta situación es muy clara la Iglesia, no se puede aceptar seguir un Sacramento cuando, por lo que sea, se niega o se rechaza de alguna manera otro Sacramento".

Pero la opinión de la mayoría de los cofrades respecto a la rigurosidad con la que ahora se pretende aplicar en este caso los estatutos de la Cofradía "no se da en otros", y aseguran que el cumplimiento estricto de las 'costumbres de la Iglesia' es apenas testimonial. Cofrades y vecinos de demostrada religiosidad no comprenden cómo la Iglesia puede interponerse entre la práctica de la fe y la relación de amor entre dos personas, y añaden que a pesar de esa última circunstancia no tienen por qué compartir el mismo grado de compromiso respecto a sus creencias, "si uno no quiere dos no se casan, pero cada uno respeta las convicciones del otro".

Pero lo que aún les resulta más indignante es que sean los representantes de la Institución eclesiástica en la localidad "los que se opongan a la práctica de la fe cristiana de una persona porque conviva con otra fuera del Sacramento del Matrimonio en pleno siglo XXI", una actitud que para la mayoría "se ha quedado anquilosada en el tiempo y que flaco favor hace a una Iglesia necesitada más que nunca de fieles, pero que además contraviene lo que promulga el Papa Francisco", señalan. La interpretación que la mayoría hace de esta situación es que "si quiere ser mayordoma tiene que renunciar al amor con su pareja", de donde surge la paradoja de que el amor en su sentido más amplio, y que promulga la Iglesia, una parte de este sea interpretado finalmente como pecado.

Situación de la Cofradía

Así las cosas, el objetivo del encuentro solicitado al obispo por los cofrades es reconducir la situación actual de conflicto hacia la normalidad y evitar que se materialice la disolución de la Cofradía, tal y como se aprobó en su última asamblea, una decisión que resultó ser consecuencia del sentimiento de decepción, impotencia y más tarde indignación al ser informados de que la designación unánime de las nuevas mayordomas, una semana antes, se quedaba en el limbo por unos argumentos que hasta ese momento jamás habían escuchado.

La reacción de los cofrades ante la nueva situación derivó en la propuesta de su disolución`, a la que se mostraron de acuerdo la mayoría, y la presentación de la dimisión de su presidente y secretaria, anuncios que aún no han cobrado oficialidad y cuya situación se pretende reconducir con el apoyo del obispo Carlos, pues su negativa pondría fin a una Cofradía con 160 años de historia y principal referente en la celebración del Corpus en Vitigudino.

Pero no todos los cofrades están convencidos de que sea posible una marcha atrás a los pasos ya dados. Algunos de los consultados por este diario sostienen que el acuerdo de disolución fue oficial, aunque el anuncio de un acuerdo con el Prelado diocesano sería un argumento más que suficiente para retomar los hechos momentos antes de la última reunión de la Cofradía. Su presidente, al menos, se muestra esperanzado de que se llegue a un acuerdo con el obispo y poderlo anunciar ante la Asamblea de la Cofradía, y si esto no es así, el acuerdo de disolución será comunicado por escrito a la Diócesis para que proceda en consecuencia.

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