La paella y 'el toro de cajón' quedan marcados por la lluvia

Las fiestas del Carmen en la localidad de Villoruela van llegando a su fin. La jornada del sábado estuvo marcada por la lluvia. El día comenzaba oscuro, con el cielo encapotado pero la lluvia no aparecía. Era el día en el que se come la paella en la zona de acampada. Se realizó paella para 1500 raciones y no hubo para todos, debido a que la repartición se hizo rápido porque no dejaba de llover.

Ya entrada la tarde, daba comienzo el segundo de los encierros del llamado toro del cajón. Un encierro multitudinario en el que jóvenes del pueblo y alrededores disfrutaban del acto taurino.

Aunque la noche estaba fría, la orquesta Galeón la animó de tal manera que nadie se movía de la plaza mayor del pueblo.