Un soleado sacrificio y una multitudinaria comida despiden la temporada de matanzas

Aldeavieja de Tormes ha tenido el honor de cerrar hoy la temporada de matanzas 2017/2018. Pese a la mala previsión meteorológica, que obligó a instalar una enorme carpa en la Plaza Mayor, el tiempo respetó la fiesta matancera, celebrandose con total normalidad.

La jornada comenzó con los preparativos, con degustación de aguardiente y perrunillas al son de la gaita y el tamboril de Ángel Rufino de Haro, El Mariquelo, que acompañó el festejo toda la jornada. Los matarifes se ocuparon del chamuscado del animal, y el posterior despiece en torno a las 14:00 horas, con cielos despejados y un atento público que no quiso perderse los detalles del proceso.

Al mismo tiempo, se fueron ofreciendo las diferentes degustaciones de la jornada, como jamón, torreznos, vino y dulces. Además, se cocinaron 300 raciones de comida matancera, con las tradicionales chichas como plato principal. Los comensales, entre los que se encontraba el alcalde, Miguel Alonso Rodríguez, acompañado de otros primeros ediles, como Eloy García de Montejo y Manuel Ramos de Berrocal de Salvatierra, compartieron mesa en la gran carpa, donde también se ofreció entretenimiento para los más pequeños y el sorteo de una paleta por la tarde.