Contra pereza, diligencia

Sostiene Ernesto que en estas tierras de pan llevar y vino traer, nunca ha anidado la pereza, al contrario; sus habitantes se han caracterizado por su laboriosidad, un entusiasmo emprendedor y la máxima diligencia. Las lenguas de doble filo les niegan estas realidades aportando unas supuestas pruebas, a todas luces erróneas cuando no manipuladas, para arrimar las ascuas a sus denigrantes teorías. Vamos a analizarlas ?prosigue Ernesto.

En primer lugar afirman que sus convecinos no buscan emprender un negocio, taller, oficina o industria autónoma, sino hacerse funcionario, tener una paga segura toda la vida y no moverse del puesto de trabajo?, que para el Estado se trabaja sentado. Los malintencionados se olvidan de los miles de pequeñas y medianas empresas que conforman la espina dorsal de este país, así como de los cientos de miles de trabajadores asalariados que las hacen posible. Cierto que hay funcionarios? ¿acaso no los hay en todos los lugares de la Tierra? En nuestro país los funcionarios son auténticos héroes que renuncian a un futuro de ascensos, triunfos, preponderancia social y grandes ingresos por una labor callada y anónima como profesores, médicos, policías, etc., siempre al servicio de la comunidad por un sueldo escaso.

A continuación los resabiados señalan que en esta tierra todo el mundo participa en los juegos de azar (Loterías, Primitivas, ONCEs, Quinielas, etc.), con la esperanza manifiesta de cambiar de vida si resulta agraciado. ¡Por supuesto! ?exclama Ernesto. ¿Dónde ven el problema? Participando mayoritariamente del azar, estas laboriosas gentes sueñan con un golpe de fortuna para ampliar su industria o negocio, o para montarlo si todavía no lo tienen.

En el tercer puesto están los que defienden que estos ciudadanos prefieren la vida contemplativa a la activa; el ver al hacer; las ensoñaciones al trabajo. Cabría preguntarles a estos maliciosos: ¿No creen que en la vida hay que ser reflexivo? ¿La imaginación no es el motor de la creatividad? Quizá estos caínes no sepan que el espíritu está por encima de la materia?, y como no quiero seguir refutando incongruencias y banalidades me despido con una pregunta: ¿Cuántos literatos, pintores, escultores y artistas en general ha dado este país al Mundo? Compárenlo con el que ustedes quieran y verán los resultados.