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Acostumbrados al agua antes de dar los primeros pasos
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REPORTAJE

Acostumbrados al agua antes de dar los primeros pasos

Actualizado 27/11/2016
David Rodríguez

CIUDAD RODRIGO | El Centro Acuático y Deportivo cuenta con sesiones de matronatación para que también los bebés disfruten del agua

Hace unas semanas publicábamos la historia de tres mujeres de Fuenteguinaldo de 80 años para arriba que cada mañana acuden desde su pueblo hasta el Centro Acuático y Deportivo de Ciudad Rodrigo para realizar nado libre en las piscinas de la instalación. Ellas son las veteranas del Centro Acuático, pero ¿quiénes son los que están en el otro extremo?

De igual modo que en el caso de las mujeres de Fuenteguinaldo muchos no apuntarían tan alto a la hora de apostar por una edad máxima, a la hora de pensar en una edad mínima quizás muchos no apuesten porque sean habituales del Centro Acuático -en este caso acompañados por sus padres y madres- bebés que no han aprendido a hablar y algunos ni siquiera a andar.

Se trata de los usuarios de las sesiones de matronatación del Centro Acuático, en las que toman parte desde bebés que rondan el año de vida (o que incluso todavía no lo han cumplido) hasta niños que ya rozan los 3 años. En este sentido, este curso se están realizando dos sesiones semanales, una para bebés de 12 a 24 meses y otra para bebés de 24 a 36 meses.

Acostumbrados al agua antes de dar los primeros pasos   | Imagen 1El padre de uno de los 'veteranos' explica que llegaron hasta el Centro Acuático dentro de un grupo de 3-4 padres que decidieron apuntarse todos juntos con sus hijos para que estos tuvieran un primer contacto con el agua, que les puede resultar muy útil. En sus propias palabras, familiarizándose tan pronto con el agua, "el día de mañana no tendrán tanto problema, eso que te quitas; aprende mucho más pronto que otras generaciones".

Asimismo, sirve de nexo de unión, ya que según apunta la madre de una de las más peques (acaba de cumplir el año y ya lleva acudiendo varios meses), gracias al Centro Acuático "no se pierde" la experiencia acuática vivida durante el pasado verano, que no volvería a tener hasta la próxima época estival.

Como reconocen varios de los padres, estas sesiones de matronatación son ideales para la época invernal: "hay pocas cosas que hacer con los bebés en Ciudad Rodrigo y matamos dos pájaros de un tiro, ya que aprende a nadar antes".

Evidentemente, el trabajo es diferente en los diversos grupos de edad. Con el grupo de más pequeños, se trabaja para que empiecen a tener sensaciones con el agua, "que no les dé miedo", y que se vayan sumergiendo poco a poco. Asimismo, se intenta por ejemplo que vayan aprendiendo a tener estabilidad sobre una superficie como una colchoneta acuática.

En esta labor participan los propios monitores del Centro Acuático así como sus padres que están acompañándoles en todo momento, favoreciendo que tengan una relación padre/madre-hijo en un lugar diferente, amén de que los propios padres "nos lo pasamos en grande". Además, los niños tienen su primer contacto con otros pequeños, que es mayor y más consciente en el grupo de niños más mayores.

Acostumbrados al agua antes de dar los primeros pasos   | Imagen 2En este grupo las experiencias son diferentes ya que, por ejemplo, fuera del agua ya saben andar, y de hecho, algunos ya han empezado recientemente el colegio. Según apunta uno de los padres, tras estar en el colegio todo el día "corre que te corre", la experiencia en el agua sirve también "para relajarse", llegando a casa más calmados. Para estos niños tan pequeños, la actividad en el agua no deja de ser "una actividad enorme", que les lleva a cansarse bastante, "cenando bien y durmiendo bien".

De este grupo, otro familiar indica que las sesiones en el agua "le vienen bien para el desarrollo motor y para dominar el medio acuático", indicando otra madre que "se ve la evolución y ya casi los puedes dejar solos".

Una de las madres cuya hija lleva ya 2 años acudiendo, desde que tenía 8 meses, indica que "a nivel motriz le ha venido muy bien, desarrollando más el cuerpo y teniendo más facilidad para andar". Dentro del agua, alguno ya se atreve a tirarse desde el borde de la piscina.

Todas estas sesiones de matronatación cuentan con "actividades nuevas cada día, con mucho material", según apunta uno de los padres. Precisamente, otro de los objetivos de estas sesiones es que los niños se estimulen manejando objetos de diferentes tamaños, texturas, formas y colores, trabajándose incluso el conocimiento de animales de la fauna acuática.

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