Sadia con su ‘Cruce de caminos’, el viernes en La Aquitara

Este viernes una nueva velada musical con Sadia y su Cruce de Caminos, para los amantes del blues y el rock clásico, a las doce de la noche en La Alquitara.

La historia de Sadia comienza en los años 90 cuando tres hermanos adolescentes: Iván, voz y guitarras, Manuel, batería y Mario, bajo; comienzan a tocar en diferentes grupos locales, para después, en 2009, unirse con el nombre de Sadia.

Se describen como un grupo con un marcado estilo personal que bebe de diferentes fuentes sonoras y encuentra su esencia en el blues y el rock clásico, con influencias de country y del blues más antiguo.

Publicaron su primer EP en febrero de 2014, Cruce de caminos, en el que aparecen cinco de sus canciones. Con el título pretenden recoger la esencia de la temática de las letras -un punto de encuentro entre el amor y el desamor, el éxito y el fracaso, la luz y la oscuridad- y su vez, apunta a uno de los tópicos del blues, el famoso crossroads que popularizó Robert Johnson y que se trata además de un lugar común en la música afroamericana de raíces.

Desde entonces están presentando y promocionando en directo este trabajo por numerosos escenarios del país. Lo hacen en formato eléctrico y acústico, mostrando así dos dimensiones diferentes del grupo. En eléctrico son un trío de rock blues más enérgico y en acústico incorporan un componente folk. Hay canciones exclusivas de cada formato, versiones diferentes de la misma canción, distinta instrumentación, etc.

En mayo de 2014 ganaron el concurso para grupos emergentes organizado por el Facyl, Festival Internacional de las Artes de Castilla y León, reconocimiento que además de suponer para ellos, un estímulo para seguir adelante, les dio la oportunidad de participar en el FACYL 2015 como teloneros de M-Clan en la Plaza Mayor de Salamanca.

Sadia es, por tanto, un grupo de músicos experimentados con un nuevo horizonte por delante, que apuesta por su propia música huyendo del mimetismo, lejos de las tendencias y de las modas, y que mira al futuro sin perder de vista el pasado musical que nos enriquece y nos da sentido.