El día del soltero, la antesala de san Valentín

El día del soltero se celebra la víspera del día de san Valentín, pero no se trata de una fiesta antisanvalentín, sino de la verdadera festividad de los solteros. Con esta celebración, se pretende hacer un canto a la libertad, al amor y a la posibilidad de elegir con quien pasar un buen rato divertido.

La figura del soltero, a esta altura, es muy codiciada, despierta cierta envidia. Mola eso de hacer lo que a uno le viene en gana, sin tener que dar explicaciones más que a sí mismo. En el caso de las mujeres solteras, eso de quedarse para vestir santos, que era visto como una nube negra, ha cambiado mucho para bien, y se nota. También la soltería tiene sus inconvenientes, sobre todo, cuando las fuerzas comienzan a flaquear.

El 13 de febrero, día del soltero, es, por lo tanto, un día grande. No tiene santo patrón, pero hay alguien o algo que nos dice que lo importante es saber llevar la soltería, y, más, cuando esta ha sido una decisión personal, no como una situación pasajera que "lamentablemente" hemos de vivir. No pienses que eres el único ser en el mundo que está solo, hay millones de personas en todo el planeta, que están en tu misma situación. Todo depende del lado que lo tomes: o aceptas tu soltería y la disfrutas a lo grande, o vives esperando, eternamente, a tu príncipe azul o a la mujer de tus sueños con esperanza ilusa.

Este cartel nos recuerda a aquellos programas de mano, que anunciaban la representación de un ciclo de dramas y comedias por aquellas compañías, que, en otros tiempos, se acercaban a nuestros pueblos a distraernos y sacarnos un rato de la monotonía de lo cotidiano, bien en el salón o en una carpa que solían montar en la plaza de la localidad. Y es que el amigo Norberto lo vivió también en Gajates, y se le quedó tan grabada la publicidad de aquella gente, que le ha servido de modelo, para trenzar el programa de la fiesta de san Valentín en su café Central de Macotera, fiesta que se ha consolidado de tal forma, que se ha convertido en tradicional; pero antes desgranar el contenido y los entresijos del jolgorio, queremos contar algo del Santo, y por qué se le nombró Patrón de los enamorados.

Valentín se cree que fue uno de los tres mártires, que ejecutó el emperador Claudio II el año 270 d.c. Poco se sabe sobre las vidas de estos tres hombres. Muchas de las leyendas que los rodean, actualmente, fueron probablemente inventadas durante la Edad Media en Francia e Inglaterra, cuando el día festivo de 14 de febrero empezó a ser asociado con el amor, a raíz de la historia de San Valentín, quien habría sido ejecutado un 14 de febrero, al no querer renunciar al cristianismo y haber casado a parejas en secreto, después de que el matrimonio de soldados fuese prohibido por el emperador Claudio II, ya que, para éste, los soldados, sin familia, eran mejores soldados.

Otra leyenda dice que es patrono de los enamorados, porque su fiesta coincide con el momento del año en que los pájaros empiezan a emparejarse.

La festividad se borró del calendario eclesiástico en el año 1969, como parte de un intento por eliminar santos de un origen, posiblemente, legendario, pero el personal la sigue celebrando con el pretexto de que el amor es sagrado con o sin san Valentín.

Antes de que san Valentín se hiciese cargo de las cosas del amor, el oficio lo ejercieron dos deidades: Eros o Cupido (deseo) y Afrodita. Eros fue el patrón del amor entre los hombres, mientras Afrodita presidía sobre el amor de los hombres por las mujeres; pero, en realidad, Eros fue el ayudante de Afrodita en los enredos y trapisondas de los arrumacos. Hay varias versiones sobre su nacimiento: una de ellas que brotó de un huevo puesto por la Noche, quien lo había concebido con la Oscuridad. Su perpetuidad encarna no solo el impulso del amor erótico, sino también la fuerza creativa de la floreciente naturaleza.

En mi pueblo, a pesar de los curas, san Valentín tiene su santuario: el bar que regenta nuestra pareja amiga, Norberto y Rosario. Y, en su estante, el Santo tiene su hornacina desde la que recoge y bendice el sacrificio amoroso con que le honran las víctimas del amor. Con este plato, que nos confecciona Norberto, es suficiente para llenar el local de bote en bote de parejas del amor. Algunas asisten para renovar su amor: los de las bodas de plata; las más formales, para acrecentar el acercamiento y las del flechazo para ofrecerse esa ternura incontaminada de una pasión que empieza a brotar; y, un aparte se merecen los devotos de san Antonio, que se pasan la vida esperando una oportunidad, que, a veces, no llega por tacañería con el santo.

Con la actuación de Raúl y su acordeón, como salsa de la velada, los chicos y chicas van a disfrutar de lo lindo, la noche del 13 de febrero, a las 23.00 horas. Habrá regalos, consumiciones gratis, confeti, guirnaldas y globos multicolores, y ambiente del bueno. Antes las parejas de amigos habrán compartido mesa y mantel en los restaurantes de la villa.

¡Lo que puede el amor!